Entrando por la verja de este paraíso de caza y relajación, le reciben dos filas de cipreses. La recepción más cálida que puede disfrutar en toda España, la ofrece Doña Soledad a sus invitados, tras años de procurar el disfrute de la cocina, la caza y el descanso en su finca. Entrando por la puerta principal, se asombrará por su salón lleno de antigüedades, entre las que están los muebles del propio Álvarez de Mendizábal. Tapeo gourmet, vino, copazo y flamenco auténtico en vivo, junto a esta chimenea de granito, sobre butacas cómodas con vistas al campo. Aquí podrá fumar en interiores. En mesa de su comedor disfrutará del tapeo manchego al nivel de esta casa con tradición histórica, con grandes quesos, jamones, la carne de los Montes de Toledo y repostería casera. Fingers de pollo y otras opciones a su gusto para los pequeños, como ensaladilla rusa casera. Le sorprenderá hasta la vajilla de la casa, y donde hasta el cenicero es de plata. Cante jondo, guitarreo, taconeo y palmas del más gitano flamenco en la finca para acompañar su gran cena. En estos jardines, gozará de una mesa bajo pérgola, rodeada de campo y se relajará en los espacios chill out con sofás en varios rincones especiales de la finca. Olores a lavanda, al verde entorno de la dehesa y vista a la Sierra San Vicente. El atento servicio le satisfará, por su cercanía. La finca mejor valorada para el ojeo de perdices, de toda España. Salón de fiestas en pabellón contiguo con barra, chimenea y amplio espacio para el baile con la música de su gusto. Hasta 12 aposentos para quedarse, de estilo rústico con reminiscencias victorianas. A sólo 1 hora de Madrid Capital.

Tapas manchegas en este salón, frente al fuego. De bandeja en otra, le van ofreciendo desde el mejor jamón, embutidos tradicionales y queso viejo de oveja. Un despliegue de tanto trofeo de años pasados, es muestra de la tradición cazadora de la familia que se dedica a la conservación de esta finca, desde hace décadas. La experiencia gastronómica en Toledo con flamenquito y copa de manzanilla andaluza, de Porto o combinados, destilados y otros de alta calidad, cognac, vermut, licores y espumosos para las ocasiones especiales como esta en finca privada toledana, a 1 hora de Madrid centro.

Disfrutará del más auténtico flamenco en el comedor de la casa principal recibe con gran comodidad y clase a hasta 18 comensales, con capacidad para hasta 40 en el pabellón de festejo. La cocina manchega sabe mejor servida en la vajilla especial de la Casa, porque la comida entra por los ojos. Un juego para los desayunos, otro para las comidas, un tercer juego para las cenas y otros para cenas de gala. En la finca llegan a comer, a cazar y a descansar de todos los rincones del Mundo y entre ellos, personalidades que todos conocemos, de la Casa de Alba o del mundo del espectáculo, por la total intimidad y gran belleza que caracterizan a la casona. Más trofeos y piezas de la historia, adornan este comedor donde disfrutará de la cocina de Castilla-La Mancha.

Mesa al aire libre con vistas al campo, encinas, lavanda, cantueso, aves y olivos. Lo más relajante que habrá hecho en un buen tiempo, será salir a descubrir los senderos de esta tierra de cazadores. Flamenco al más puro estilo gitano al aire libre en el jardín de esta finca en Toledo. Aire puro manchego, flora y fauna que enriquecen visión y pulmón.

Más de treinta años experimentando con exquisitas recetas para la perdiz, grandes quesos y jamones como el de Montánchez y croquetas de este mismo jamón, manjar extremeño. Verduras del huerto de la finca. A la brasa, la carne de los Montes de Toledo, o de la cercana Ávila, un chuletón con más de treinta días de maduración. Fingers de pollo y otras opciones a su gusto para los pequeños, como ensaladilla rusa casera. Recetas hechas con el cariño de las manos del dedicado servicio de finca. Su bodega guarda vinos como Pingus, Ramón Bilbao o Marqués de Riscal u otros tanto de D.O. Duero, Rioja o Rueda. No faltan grandes vinos de esta tierra manchega para la experiencia gastronómica en Toledo más enriquecedora.

Copa y relax o paseo por las vastas hectáreas de campo, en la finca. Copa y purito junto al fuego, con su canción favorita. En verano, bañito en la piscina con una bebida refrescante. Asiduo de esta tierra, vuelve primavera tras otra, el cantueso, a este que parece su eterno hogar Esta finca ofrece los espacios más formidables si se trata de encontrar un vasto edén con todo lo requerido para que la experiencia sea perfecta, a sólo 1 hora de Madrid Capital y a escasos 40 min. de la gran Toletum, donde podrá sumergirse aún más en la historia, entre murallas inquebrantables, su Plaza de Zocodóver, el Alcázar de Toledo, la Catedral, vestigios de mezquitas y sinagogas todavía en pie, en esta la capital de las tres culturas y de Castilla La Mancha.

Podrá estacionar su vehículo en la finca, pero si no desea conducir, llámenos para reservar Mercedes Benz Clase C ( hasta 3 pasajeros) o Mercedes Benz Monovolumen (hasta 7 pasajeros). Si prefiere un minibus o autocar para su grupo, está disponible.